Labios, lengua y más

La musculatura del complejo cráneo facial y cervical tiene un papel esencial en el crecimiento y desarrollo de sus estructuras a la vez que posibilita la realización de las funciones orofaciales (respiración, succión, deglución, masticación, habla y voz). Concretamente, labios, mejillas y lengua tienen un efecto modelador sobre los arcos maxilares y el posicionamiento dental. Por esta razón, contar con un estado de equilibrio muscular favorecerá el correcto trabajo funcional del sistema. De lo contrario, sumado a otras variables, podrá predisponer a padecer alteraciones miofuncionales orofaciales e incluso instaurar una maloclusión dental.